El virus del Oropouche continúa extendiéndose por Cuba y actualmente está presente en todas las provincias, 99 municipios y 172 áreas de salud.
Ante el incremento de la arbovirosis, el doctor Francisco Durán García, director nacional de Higiene y Epidemiología, ofreció este miércoles una actualización de la situación epidemiológica del país en el Noticiero del Mediodía.
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Durán recordó que los síntomas (fiebre, dolor de cabeza, dolores articulares y musculares, vómitos y diarreas), se parecen mucho a los del dengue, y por ello es muy importante que la persona vaya al médico, para diagnosticar qué enfermedad tiene.
El especialista subrayó que el Oropouche tiene una evolución bastante satisfactoria; no obstante, en países como Brasil se han descrito complicaciones de meningitis y encefalitis que empeoran el cuadro clínico del enfermo.
"Nosotros en Cuba no tenemos casos graves, críticos y mucho menos fallecidos por esta enfermedad", recalcó.
Durán admitió que es cierto que a veces, a los pocos días de que el paciente se recupera, vuelve a sentirse mal.
"Por eso insisto en que lo importante en la atención médica, porque en Cuba está circulando el dengue en 12 provincias y el dengue sí puede complicarse. Y lo primero fue Oropouche, pero ero a lo mejor la segunda vez lo que adquirió fue un dengue", detalló.
El experto señaló que ya se han reportado casos de transmisión vertical de la enfermedad (de madre a hijo), algo que no ha ocurrido en Cuba hasta este momento.
Por último, Durán precisó que la enfermedad la transmite un jején llamado Culicoide y el mosquito Culex. Este último está en todo el país y se cría no solo en aguas limpias, sino en aguas contaminadas y albañales, "en cualquier fanguero -para hablar en buen cubano- con una acumulación de agua se puede criar, se puede criar en la fosa".
La semana pasada, ante el aumento considerable de casos, Durán reconoció que la situación epidemiológica en el país es "compleja" debido a la co-circulación de múltiples virus, incluyendo la influenza, el dengue y el Oropouche.
El especialista agregó que se mantiene una vigilancia continua sobre estos virus, y se han intensificado las medidas de prevención y control para mitigar la propagación y tratar eficazmente a los afectados.
Sin embargo, recientemente reconoció que el país no tenía recursos para combatir al mosquito a través de campañas de fumigación, lo que complica aún más la situación epidemiológica cubana.
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