El derrumbe total de una vivienda del poblado de Agramonte, en el municipio de Jagüey Grande, Matanzas, este lunes, dejó en la calle a una familia, que afortunadamente no se encontraba en la casa al momento del siniestro.
Según reportes en redes sociales, la vivienda ubicada en la calle Aguilera entre Maceo y Martí se vino abajo en la tarde del lunes, debido a “fallas estructurales”. No se reportaron víctimas mortales ni lesionados.
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“Por suerte no había ninguna persona en su interior y no hubo que lamentar pérdidas humanas. Lamentamos mucho lo ocurrido. Nuestro apoyo a Ofelia y familia y ojalá puedan recuperar algunas de sus pertenencias”, señaló un post en el perfil de Facebook “Agramonte City. Foto Rey”.
Otra publicación en la red social informó que al lugar acudieron los bomberos y ordenaron evacuar a los vecinos por posible derrumbe de las casas aledañas.
Residentes de la zona donde ocurrió el derrumbe comentaron que la dueña de la casa había alertado a las autoridades de la localidad sobre el peligro de caída de su vivienda y no tuvo una respuesta a su reclamo.
“Si el gobierno y el partido la hubiesen escuchado desde que ella está informando el estado de derrumbe de la vivienda, no se hubiese hoy tenido la pérdida de todos sus bienes que con tantos sacrificio y trabajo ella los adquirió, siendo trabajadora de 45 años de trabajo, espero que el estado le ayude en la adquisición de todos sus bienes”, comentó una persona cercana a la dueña de la casa.
Sin embargo, luego del colapso de la vivienda, sí se presentaron en el lugar las autoridades locales.
En una publicación sobre el hecho, Hanny Martínez, dirigente del partido, aseguró que se construirán siete casas, una para las personas damnificadas y otras seis para las familias vecinas.
“Se produjo un derrumbe de una vivienda total por fallas estructurales, no se lamentó pérdidas humanas, sí materiales. Con esa misma situación existen pegadas a esa vivienda otras 6, se procedió a la auto-evacuación de las personas del lugar”, explicó.
Martínez dijo que este martes comenzaría el “proceso de demolición y se construirán 7 casitas para esas personas” y aseguró, en el habitual tono triunfalista de los dirigentes del país, que “la Revolución nunca deja desamparados a sus hijos”.
Sin embargo, en los comentarios a las publicaciones trascendió la preocupación de cubanos sobre el aumento de derrumbes en el país, que ponen en peligro o truncan las vidas de muchas persona, incluso rescatistas. Asimismo, hubo críticas a la falta de acción del gobierno para resolver los acuciantes problemas de vivienda en Cuba.
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