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La finca en Sevilla del futbolista Sergio Ramos fue objeto el pasado 20 de septiembre de un atraco donde los ladrones se llevaron joyas, ropa de marca, dinero en efectivo y varios relojes de lujo.
El hecho sucedió mientras el excapitán del Real Madrid participaba con el Sevilla (su actual equipo) en un partido de Champions contra el Lens, y su esposa Pilar Rubio estaba fuera de la ciudad andaluza por motivos profesionales.
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En la residencia, ubicada en Bollullos de la Mitación, sí se encontraban los cuatro hijos del matrimonio y sus dos cuidadoras, quienes no sufrieron daños durante el incidente.
La Guardia Civil ya investiga el asalto, según dijo ‘ABC’.
“El principal botín han sido cuatro relojes de lujo. Es un botín muy importante para los ladrones porque se puede esconder fácilmente. Ocupa poco y tiene un mercado negro importante”, informó el periodista Dani Montero en ‘El Desmarque’.
De acuerdo con Montero, los delincuentes “iban a por esos relojes”, por lo que la policía valora la posibilidad de que alguien del entorno de la pareja hubiera aportado información a una banda que ya habría perpetrado varias acciones de este tipo en la zona.
Un reporte de ‘NIUS’ confirmó que entre los relojes sustraídos se cuenta un Patek Philippe Nautilis Perpetual de oro blanco y esfera azul, con un valor en el mercado de más de 118.000 euros.
La finca, denominada ‘La Alegría’, se encuentra a unos 20 kilómetros de Sevilla y posee una extensión de 44 hectáreas. Allí celebró su boda en 2019, y en su interior destaca la Yeguada SR4 y el mundialmente famoso caballo Yucatán de Ramos.
Además, el terreno dispone de mansión residencial, piscinas, pista de pádel y un campo de fútbol.
Sergio Ramos había sido víctima de un asalto previo cuando vivía en el barrio madrileño de Conde Orgaz, pero entonces los cacos huyeron sin botín.
De 37 años, el zaguero Ramos fichó por el Sevilla el 4 de septiembre, procedente del PSG.
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