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Con un hit al centro del terreno sobre envío de Jordan Montgomery, el cubano Lourdes Gurriel Jr. arribó anoche a los 600 imparables en el mejor béisbol del mundo.
De ese modo el espirituano se convirtió en el trigésimo octavo jugador nacido en Cuba que alcanza dicha cantidad de hits, de acuerdo con el sitio especializado Baseball-Reference, que incluye la actuación de los peloteros que se desempeñaron en las Ligas Negras.
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De 29 años, el jardinero de los D-backs cerró la cifra en su sexta temporada (las cinco anteriores las jugó para los Azulejos) con los siguienets totales en cada una de ellas: 70, 87, 64, 138, 132 y 109.
Es evidente que en la presente campaña va camino de superar su tope personal de indiscutibles para un campeonato -a su equipo le restan 36 encuentros- si bien no es menos cierto que anda por debajo de sus medias históricas en average (.279 general por .258 ahora) , OBP (.325 por .306) y slugging (.467 por .463).
Ello se debe a que, luego de un formidable mes de mayo que lo llevó a ser elegido para el All-Star Game, su producción cayó sensiblemente en junio y julio, meses en los que promedió por debajo de la tristemente célebre Línea Mendoza.
De mantenerse en salud, Lourdes Jr. podría escalar en este curso hasta el peldaño 33 de los máximos 'jileros' cubanos, desplazando por este orden a Armando Marsans (612), Leonys Martín (617), Valentín Dreke (119), Bobby Estalella (620) y Paul Casanova (627).
El Top Ten cubano de hits a ese nivel lo encabeza Rafael Palmeiro (3020), a quien le siguen Tany Pérez (2732), Bert Campaneris (2249), Minnie Miñoso (2113), Tony Taylor (2007), Tony Oliva (1917), José Cardenal (1913), José Canseco (1877), Leo Cárdenas (1725) y Cookie Rojas (1660).
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