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El gobierno cubano pretende controlar las ilegalidades en la libreta de abastecimiento mediante un sistema informático implementado en el país.
Con el software Oregi -desarrollado en alianza con la empresa Xetid- se digitalizarán los movimientos de núcleos y consumidores en las Oficinas de Registro de Consumidores (Oficodas), lo cual impedirá que una misma persona esté en dos libretas o que ciudadanos fallecidos o fuera del país formen parte de los núcleos, según trascendió este martes en una nota del medio oficialista Granma.
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El software trabaja con la "ficha única del ciudadano", que facilita la interoperabilidad entre los registros públicos y las Oficodas, y actualiza la cantidad real de consumidores en Cuba, refirió Zahidy Álvarez Amador, jefa nacional del Registro de Consumidores del Ministerio del Comercio Interior (MINCIN).
Al estar integrado con otras entidades, el sistema agiliza la localización de los consumidores para efectuar las bajas por salida del país y por fallecimiento, explicó la funcionaria.
"Esto significa que, ya implementado, los trámites en las Oficodas se realizarán de forma digital, con una información fidedigna de lo que realmente sucede dentro de los núcleos familiares, con lo que se evitan ilegalidades que en estos momentos atentan contra el sistema", señaló la mujer.
El "despliegue digital" de Oregi abarca el 80% de los casi 3,944,084 núcleos existentes en el país, donde los territorios más avanzados son Pinar del Río, Artemisa, La Habana, Camagüey, Guantánamo y el municipio especial Isla de la Juventud; mientras que los retrasados son Matanzas, Cienfuegos, Sancti Spítirus, Ciego de Ávila, Holguín, Granma y Santiago de Cuba.
Aunque se insistió en el texto del diario oficialista en los "beneficios" de Oregi, el proyecto informático implicará un control mayor de los productos racionados en la libreta, pues permite el procesamiento de los datos que incluyen los cierres y la cantidad de consumidores mensuales para la asignación de la canasta familiar normada a las bodegas.
"Este nuevo sistema no permite fraudes ni ilegalidades, como que una misma persona estuviera en dos libretas, o que ciudadanos fallecidos, fuera del país o recluidos en hogares de ancianos formaran parte de los núcleos de consumidores", esgrimió Eyigsi Cueto Ruiz, directora de la Dirección Estatal del Comercio en Villa Clara.
Según transmitió Cueto, en esa provincia llegaron a estar inscritas en la libreta personas que llevaban más de cinco años fuera del país, fallecidos o niños nonatos, un fenómeno que se debió al "descontrol que imperaba en algunas Oficinas de Registro de Consumidores de esta provincia, y a otros fenómenos que propiciaban tales anomalías", que beneficiaba "de manera ilegal" a unas 36,000 personas.
Previamente, las autoridades migratorias esperaban dos años para informar a la Oficoda si alguien se hallaba fuera del país pero desde febrero del año pasado, a partir de la Ley 47/2021 del MINCIN, se le da "baja de oficio" de la libreta de abastecimiento a los residentes en Cuba que fallezcan, salgan del país por más de tres meses o ingresen a un centro penitenciario u hogar de ancianos, lo cual implica un mayor control de la libreta.
Años atrás, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel expresó que quería informatizar las Oficodas para recortar el número de funcionarios dedicados al papeleo en empresas estatales, aunque la informatización implica realmente un control estricto de los consumidores y la obligatoriedad de regirse por las normativas establecidas por el MINCIN.
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