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Estudiantes universitarios cubanos denunciaron en sus redes sociales la mala alimentación que reciben en los comedores de sus centros de estudio, que, unida a la escasez generalizada y los altos precios de los alimentos, contribuyen a una deficiente nutrición de los jóvenes.
“Así no hay quien viva y estudie en una universidad. Esto es lo que he almorzado en 3 días seguidos”, denunció el usuario identificado en Twitter como Rubielito Suárez, compartiendo fotografías del menú de tres días consecutivos, en los que se repite el arroz blanco, un potaje muy licuado, fufú de plátano y un trozo de melón pálido como postre en uno de los días.
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Según afirmó el joven, las imágenes se corresponden al menú de los últimos tres almuerzos, “pero así llevamos días”. Para remachar el disgusto, el joven denunció que, tras el precario almuerzo de este lunes, fue víctima de un apagón.
“Ahora sin corriente. Después de comerse eso y llenarse con agua, tampoco podemos dormir para olvidarse del hambre. ¡Ya no aguanto más!”, protestó el joven youtuber y músico de Holguín, cansado de las dificultades que enfrenta durante sus estudios superiores.
Su tuit fue contestado por otro estudiante que también compartió una foto de su bandeja de comedor. “En la mía estamos así desde la semana pasada”, aseguró el joven mostrando el arroz blanco y el potaje de chícharos que tiene como almuerzo en los últimos siete días.
"En el IPVC de Cienfuegos nos daban pan con pasta de arroz, man. Como tú entiendes, eso de arroz blanco se pone de pin... Y eso fue hace 9 años, que esto estaba mejor, así que considero enormemente a todo el que esté becado [internado] hoy por hoy, y más estudiando", contestó otro.
“La comida siempre ha sido mala”, opinó Suárez, señalando que antes al menos había algo de oferta gastronómica en pesos que les permitía complementar la mala alimentación provista por el Estado a los estudiantes.
“Antes uno por lo menos salía y podía comer una pizza, un pan, o un jugo. Actualmente, casi todos los quioscos que hay venden todo carísimo y casi todo lo que tienen son productos en MLC. Y un pan de 30 pesos no llena. Y no hay economía para dos”, añadió.
Según Suárez, el menú de arroz con potaje es el habitual desde hace aproximadamente un mes. “A veces le ponen un huevito (hervido) y ya, pero muy pocas veces”, explicó el joven, harto de no probar una alimentación variada, con preparaciones dignas.
Al usuario que le contestó le pareció que se quejaba de algo que todavía podía empeorar, según su propia experiencia. “Entonces, ¿de qué te quejas mi rey? Eso es un banquete. En la mía es arroz y chícharo”.
“No todos los días hay 60 pesos para comerse una pizza en la cafetería”, señaló otra estudiante en los comentarios. “Es muy triste hermano. La educación y la salud son supuestamente gratuitas, pero cuestan mucho”, consideró otro.
No es la primera vez que la alimentación de los estudiantes universitarios cubanos provoca el enfado y la indignación entre la comunidad docente del país. A finales de 2019, la comida de los estudiantes de la Facultad de Medicina en Santiago de Cuba fue blanco de críticas.
"Aquí les presento la comida de los estudiantes de La Facultad 2 de Medicina, en Santiago de Cuba", denunció Ruhama Fernández en Facebook. "Llevan 3 días comiendo arroz y arroz con azúcar. Por favor, ¿con qué fuerzas van a estudiar cada día nuestros futuros médicos? ¡Qué dolor! #ElCambioEsYa", agregó.
La mala calidad de la comida también ha sido objeto de protesta por parte de estudiantes universitarios extranjeros. Además de impagos de sus becas, en abril de 2019 estudiantes congoleños protestaron por la mala calidad y la escasa cantidad de comida que recibían en Cuba. El tono de las protestas obligó a montar un operativo policial en el campus.
“No queremos premios Nobel. Solo envíen comida”, dijeron desesperados estudiantes sudafricanos de medicina, protestando por el endurecimiento de sus condiciones de vida y la mala alimentación que recibían en Cuba en los meses de confinamiento durante la pandemia de coronavirus.
En el mismo período, fueron numerosas las denuncias de cubanos en redes sociales, quejándose por las condiciones de higiene, la falta de insumos médicos y la mala alimentación que recibían en los centros de aislamiento e instalaciones hospitalarias del país.
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