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Las autoridades de Las Tunas pidieron un esfuerzo a los ganaderos para suplir el déficit de las importaciones de leche en polvo, el cual no ha permitido -ni permitirá- cubrir la entrega del producto en las dietas médicas en la primera parte del año.
Arael Martínez Teruel, director de la empresa de productos lácteos de la provincia, explicó que dada la imposibilidad de satisfacer la demanda, son los campesinos quienes deben asumir la responsabilidad y producir más.
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En una reunión con productores y distribuidores, reseñada por el Periódico 26, el gobernador Jaime Chiang Vega acusó a los primeros de desviar leche a otros destinos más lucrativos, en detrimento de la industria y las unidades estatales de comercio.
El dirigente reprochó la actitud de los ganaderos, y recordó que hace dos meses se aumentaron los precios de compra y se mejoraron las tarifas para el acarreo y el enfriamiento.
"Incluso, se paga una parte en moneda libremente convertible", dijo, sin hacer alusión a los problemas de impagos por parte de la empresa láctea a los productores, que estos denunciaron en octubre pasado a Periódico 26.
Según detalló Yoel Martínez Vargas, delegado de la agricultura, en el municipio de Las Tunas hay registradas alrededor de 8,000 vacas en ordeño, que dan un promedio de 3,8 litros de leche por día, los cuales totalizan 25,600 litros acopiados. Sin embargo, la industria solo recibe unos 9,000 litros, por lo que casi el doble de lo que se entrega al Estado va a otros destinos.
En opinión de Manuel Pérez Gallego, primer secretario del Partido en la provincia, la solución pasa por aumentar el control estatal sobre los ganaderos, y evaluar aspectos como la garantía de agua y comida, el manejo del rebaño y los planes de entrega de leche.
"Evidentemente ha faltado llegar a todos los campesinos, en sus propias fincas si fuera necesario...", señaló.
En medio de una grave crisis económica, con una escasez de alimentos sin precedentes, el gobierno cubano continúa pidiendo un esfuerzo extra a la población.
El mes pasado Díaz-Canel pidió a los productores y vendedores de alimentos que renuncien a sus ganancias para bajar los precios y que la población pudiera acceder a los víveres para las fiestas de fin de año.
El mandatario llamó a "una discusión política con todos los productores y comercializadores, y convencerlos de la necesidad de en las circunstancias actuales, renunciar a un determinado nivel de rentabilidad o ganancia particular o colectiva, en función de bajar precios y que la población tenga precios más asequibles".
Según Díaz-Canel, la mayoría de productores y vendedores estarían de acuerdo en renunciar a su dinero, "porque son parte de este pueblo".
El problema de las dietas médicas de leche en polvo no es solo en Las Tunas, sino en todo el país.
En diciembre, la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez informó que en enero no se podrá garantizar este alimento a las personas con problemas de salud graves o crónicos que lo necesitan.
En declaraciones a Radio Reloj, Díaz Velázquez reconoció que de todos los productos de la canasta básica la leche en polvo es el que tiene más dificultad para cumplir con las entregas, debido a la interrupción en los ciclos de aprovisionamiento a la red de bodegas, por la demora en el arribo al país del alimento importado.
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