El pelotero cubano Félix Pérez, que el miércoles recibió un severo pelotazo en el rostro durante un partido de la Liga Independiente de México, fue dado de alta este viernes en un hospital de Guadalajara y en la próxima madrugada debe arribar por vía aérea a su residencia en Miami.
En declaraciones exclusivas a CiberCuba, su esposa Yaíma Pérez reveló que Félix tiene buen estado de salud, aunque “se mantiene con el ojo cerrado y algunos hematomas. Los médicos le han recomendado alrededor de un mes de reposo (poco más, poco menos), pero no debe haber ningún problema para que se recupere y reintegre al juego”.
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La misma fuente añadió que tras el accidente, el atleta oriundo de Isla de la Juventud “fue atendido por los mejores cirujanos plásticos de Guadalajara, que al momento de la intervención quirúrgica se percataron de que no tenía una fractura como pensaban, sino dos: una en el piso bajo del ojo izquierdo, y la otra arriba”.
Por fortuna, todo salió bien. Yaíma aseguró que “gracias a Dios la lesión no afectó el nervio ni nada que tenga que ver con el ojo, ni tampoco era tan profunda como los especialistas imaginaban. Ellos incluso pensaban que tendrían que poner placas de metal en esa zona y no fue necesario, pues bastó con una malla en el hueso del pómulo. Así que Félix tiene plena visión de ese ojo”.
Curiosamente, el jardinero e inicialista de los Bravos de León se golpeó con un foul salido de su bate instantes después de que una conexión suya, también de foul, golpeara en el rostro a un aficionado en el Estadio Panamericano.
En ese momento, su temporada se resumía en tres jonrones, diez remolques y promedio de .200 (60-12) en 17 desafíos, con .724 de OPS.
El pinero de 36 años estuvo vinculado durante varios años con los Rojos de Cincinnati e igualmente posee experiencia en campeonatos profesionales de Puerto Rico, Venezuela y Japón.
Su nombre se manejó ampliamente hace unos meses (junto al de Henry Urrutia y otros más), cuando se insinuó la posibilidad de que peloteros ajenos a la Federación Cubana integraran la selección insular al Preolímpico de Florida. Sin embargo, a la postre esa iniciativa nunca se consumó.
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