El "ordenamiento monetario". Ese es el culpable, según Amed Álvarez Tejo, director de Ventas y Marketing Cuba de la firma Havana Club, de que todos los productos de esa marca desaparecieran el mes de febrero de los establecimientos en la isla.
El ron, que era uno de los productos omnipresentes en los mercados cubanos (hasta el punto de que algunos de ellos se quejaron el año pasado de que era lo único que aparecía en los mostradores) también sufrió el mismo destino de los alimentos, y comenzó escasear en cuanto empezó el nuevo año.
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La culpa, según Álvarez, la tuvieron las "negociaciones que necesariamente tuvimos que hacer con los clientes para establecer los nuevos precios en CUP, y eso devino en desabastecimiento".
A pesar de la deficiente planificación que muestran sus declaraciones, el funcionario también aseguró que "estamos ya en la fase en que podemos asegurar el respaldo productivo tanto en las tiendas de MLC y CUC, es algo que hemos establecido como estrategia de comercialización".
"Estamos reabasteciendo el mercado y se percibe una recuperación paulatina de los volúmenes de venta", añadió.
Interrogado por la periodista del medio oficialista Cubadebate sobre posible problemas de producción, Álvarez respondió que no es la producción de las plantas roneras lo que ha sufrido afectaciones. "Contamos con producción en las roneras incluso previendo que pudiera haber una sobredemanda de la población", dijo.
Sin embargo, en noviembre del año pasado, la empresa informó que había decidido retirar el dosificador plástico que se insertaba en productos como el Havana Club Añejo Blanco, el Havana Club Añejo 3 Años y el Havana Club Añejo Especial, por los atrasos en la llegada a Cuba de la materia prima imprescindible para fabricar este componente.
La producción de ron está priorizada por las autoridades cubanas según declaró el año pasado en conferencia de prensa Sergio Valdés, director de desarrollo de mercados de Havana Club.
La exportación de Havana Club crece y el producto ha consolidado su presencia en nuevos mercados, como es el caso de China, donde en 2019 aumentó sus ventas en un 20 %.
Todos los rones cubanos se comercializan en el mercado nacional e internacional. Havana Club concentra la mayor producción y asegura ser la tercera marca más importante del mundo en la comercialización de espirituosos.
La ronera San José, al sureste de La Habana, produce los licores oscuros de Havana Club. Las máquinas trabajan sin descanso rellenando, etiquetando y sellando miles de botellas de Añejo Especial, Añejo Reserva, 7 años, Selección de Maestros y otras variedades de la marca.
Havana Club Internacional es una empresa mixta entre la corporación estatal cubana Cuba Ron y el gigante francés Pernod Ricard, dueño de otras conocidas etiquetas como Absolut o Chivas.
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