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Una copia restaurada de “La última cena” inaugurará el 42 Festival Internacional de Cine de La Habana, el próximo jueves en el cine Acapulco, comunicó este martes el Comité organizador del evento.
La película del fallecido cineasta cubano Tomás Gutiérrez Alea (Titón), que restauró el Archivo de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Los Ángeles en coordinación con la Cinemateca de Cuba y el ICAIC, se proyectará por segunda vez, después de su exhibición en el Festival de Venecia, Italia.
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La cinta se unió a las cuatro producciones cubanas que restauró la academia estadounidense: La muerte de un burócrata (1966), Una pelea cubana contra los demonios (1971) y Los sobrevivientes (1979) y el documental El arte del tabaco (1974).
La entrada a la inauguración será por invitación debido al coronavirus y la cantante Zule Guerra interpretará temas de su más reciente producción “El viaje”, acompañada por Natural Trío.
En 2020, se cumplieron cuarenta y cuatro años del estreno de La última cena, inspirada en el libro del historiador cubano Manuel Moreno Fraginal “El Ingenio”, y cuya trama es una alegoría al pasaje bíblico de igual nombre; recreada en el siglo XVIII, en una plantación de caña de azúcar, el dueño, en un acto de expiación, reúne a 12 esclavos y les lava los pies el jueves santo. Luego los invita a cenar a solas con él, momento en que aprovecha para hablarles del sacrificio de Cristo y de su acto de amor hacia los hombres. Los esclavos, bebidos, entran en confianza y comienzan a señalarle sus inquietudes sobre su condición y el malestar que les genera la violencia de Manuel, el capataz.
Gutiérrez Alea nació en La Habana en 1928 y murió con 67 años, escribió y dirigió más de veinte largometrajes, documentales y cortos que equilibraron su dedicación a la Revolución Cubana y su crítica. El trabajo del cineasta, que representa el Nuevo Cine Latinoamericano de las décadas del 60 y 70, reflejó los problemas derivados del neocolonialismo y la identidad cultural , opuesto al canon de Hollywood y el cine de autor europeo.
En 1993, Fresa y chocolate se convirtió en la primera película cubana nominada para los Óscar de la academia para la mejor película extranjera, que coodirigió con Juan Carlos Tabío, a causa del cáncer que lo aquejaba.
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