El gobierno de Nicolás Maduro ha ordenado hoy el paso a prisión domiciliaria del diputado Juan Requesens, uno de los principales presos políticos del chavismo, tras dos años en las mazmorras del Helicoide, según confirmaron sus familiares y fuentes de la oposición venezolana.
"El régimen le dio a mi hermano una medida de casa por cárcel. ¡Juan está con nuestra familia!", confirmó la dirigente universitaria Rafaela Requesens.
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Pese a contar con inmunidad parlamentaria, el diputado de la centrista Primero Justicia (PJ) fue detenido de forma ilegal e inconstitucional, sin pruebas ni orden judicial, pocos días después del supuesto atentado de los drones contra Maduro, un acto militar en la avenida Bolívar de Caracas el 4 de agosto de 2018.
Requesens se convirtió así en uno de los presos políticos más emblemáticos del régimen de Maduro. Poco después de su detención, el ministro de Comunicación chavista, Jorge Rodríguez, publicó dos vídeos del opositor: en uno aparecía Requesens en una presunta confesión, mientras que en el otro estaba solo con ropa interior y lleno de excrementos.
Ya en el calabozo del Helicoide, a cargo del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) entrenado por agentes cubanos, Requesens fue drogado para que grabase un vídeo autoinculpándose como cómplice en el atentado. Semidesnudo y bajo evidentes efectos de las drogas, el régimen intentó mofarse del joven político pero consiguió todo lo contrario: Requesens se ha mantenido firme durante sus dos años en los calabozos, incluso se convirtió en un soporte importante para el resto de los presos políticos que han convivido con él.
Curtido en las aulas universitarias y en la calle, Requesens jamás evitó encararse con las fuerzas gubernamentales, que le agredieron en diversas ocasiones. Pero a la vez, era capaz de emocionar a sus seguidores con sus palabras, siempre vehementes. Lideró a los estudiantes en la Universidad Central de Venezuela (UCV), la principal del país, y fue elegido como diputado en 2015 por el estado Táchira, fronterizo con Colombia.
"Juan Requesens nunca debió estar preso. Pasó 752 días secuestrado por un régimen criminal. Es inocente. Nos alegra que esté en casa y con su familia. Nuestro más sentido abrazo y palabras de solidaridad, hermano. Fuerza, Juan", escribió en sus redes Miguel Pizarro, compañero de luchas políticas en PJ.
"Esto demuestra que es inocente y que el régimen mintió", añadió el diputado José Guerra, también de su partido.
En un vídeo subido a su cuenta en Instagram, el excandidato presidencial Henrique Capriles dio a conocer al país el reencuentro de Requesens con sus padres y su hermana, quienes no han dejado de luchar un solo día por su liberación.
"Tenemos que hacer el trabajo necesario para que el cambio tenga lugar. Y son estos hechos políticos los que dan esperanza y certidumbre a nuestra gente", tuiteó Capriles al saber la noticia de la excarcelación.
En el mentidero político de Caracas se cree que esta es la primera de varias liberaciones, incluso que algunos de los presos políticos que salgan a la calle competirían en las elecciones parlamentarias fraudulentas montadas por el régimen bolivariano para marzo.
"No descansaremos hasta que cada preso político sea liberado, cada cómplice del dictador sea juzgado y cada víctima sea tratada con justicia", escribió en Twitter por su parte Juan Guaidó, jefe del Parlamento, reconocido como presidente legítimo de Venezuela por más de 50 países y líder de la oposición contra Maduro.
Según la ONG Foro Penal, en las cárceles del chavismo permanecen todavía unos 400 presos políticos.
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