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Bomberos del Comando 9 de Regla, La Habana, tuvieron una iniciativa para llamar a los cubanos a permanecer en sus hogares como forma de evitar la propagación del coronavirus.
“Quédate en casa”, es el mensaje que escribieron sobre el suelo con los medios que usualmente utilizan estos profesionales para enfrentar los incendios, como mangueras y uniformes.
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La imagen ha sido compartida varias veces y ha recibido elogios en las redes sociales, al responder a un pedido que están haciendo las autoridades a nivel internacional frente a la crisis sanitaria desatada por la pandemia.
El coronavirus, cuyo brote se originó en la ciudad china de Wuhan, ha causado más de 42.000 fallecimientos en el mundo y más de 855.000 personas han sido contagiadas.
Estados Unidos es el país con mayor número de casos, al reportar un total de 186. 265 casos positivos a la COVID-19. Este martes el país norteamericano rebasó a China en el número de fallecimientos, pues ya registra 3.810 decesos, una cifra que solo es superada por las de Italia y España.
No obstante, los números ofrecidos por el gobierno chino han sido objeto de cuestionamientos, aun más después de verse el comportamiento extensivo y letal del virus en otras naciones con menor densidad poblacional.
Ante esta realidad, personas, organizaciones y medios independientes han sugerido que China pudiera haber falseado los números, mientras en el mundo el coronavirus se expande, el gigante asiático dice haber controlado la situación repentinamente.
Por su parte, Cuba dio a conocer este martes que habían aumentado a 186 los pacientes positivos a los análisis para identificar la COVID-19, luego de registrar 16 nuevos casos con la enfermedad.
De igual forma, el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología, precisó en conferencia de prensa que 14 de los nuevos contagiados, casi el total, eran ciudadanos cubanos.
Desde el pasado 24 de marzo, el régimen cubano ha adoptado una serie de medidas para intentar frenar el brote de coronavirus en el país, entre ellas, el cierre de fronteras aéreas y marítimas para visitantes foráneos, exceptuando los cubanos que llegaran de otros países y los residentes extranjeros.
También se les ha recomendado a las personas evitar las aglomeraciones públicas y salir de sus hogares a menos que sea muy necesario. En las calles, centros comerciales, mercados y otros establecimientos se ha reforzado igualmente la presencia policial.
Aproximadamente un 20 por ciento de la población cubana está compuesta por adultos mayores, es decir, personas con edades más proclives a sufrir complicaciones bajo los efectos del coronavirus.
El país vive hoy una crisis alimentaria y de productos elementales para la higienización y el aseo personal, que prácticamente obliga a los cubanos a salir de sus casas y sumarse a extensas concentraciones de personas a la entrada de cualquier centro donde se pueden adquirir estos medios.
Por demás, se conoce que en la Isla existe una carencia de medicamentos que preocupa a no pocas personas.
Las autoridades de la Isla reportan 2.837 pacientes ingresados, ocho han recibido el alta y 27.139 personas están en sus hogares bajo la vigilancia que se realiza desde la Atención Primaria de Salud.
El lunes trascendió que una mujer cubana fue detenida por la policía tras salir a correr, sin protección en el rostro, como han pedido las autoridades, en los alrededores de su casa, junto a su niño de 7 años.
Los hechos se produjeron en el barrio habanero de Siboney, municipio Playa, donde la madre transmitió lo sucedido por Facebook.
Más tarde se supo que la policía planteó a la mujer una denuncia por el delito de desacato.
Las mascarillas han terminado siendo de uso obligatorio en Cuba para evitar mayor contagio de coronavirus. En Cuba no se venden los modelos existentes en otros países, por lo cual el gobierno pidió a la población que confeccionara sus propias mascarillas o nasobucos, como se le conocen en la Isla.
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