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Un Ford Mustang, adscrito a la Embajada de Serbia en La Habana y un Jaguar al servicio del embajador de la Reina Isabel II en Cuba no fueron robados en Miami e importados a Cuba por una empresa supuestamente controlada por Raúl Guillermo Rodríguez Castro alias "El Cangrejo", nieto y ayudante de Raúl Castro Ruz, según confirmó CiberCuba.
Ambos casos fueron usados por el influencer Alex Otaola para denunciar un supuesto contrabando de automóviles de Miami hacia La Habana, utilizando dichas imágenes publicadas originalmente en el grupo Amigos del Motor en Facebook, donde claramente se puede apreciar la matrícula del Ford Mustag, D 204 007, perteneciente a la embajada de Serbia.
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La consejera de la Embajada Serbia en La Habana, Jelena Zivojinovic, aseguró a CiberCuba que el Ford Mustang que aparece en las imágenes usadas para la falsa revelación es el vehículo que usa habitualmente el embajador y que fue importado hace un año por la legación diplomática.
Una revisión del post de Abel Ribot-Amigos del Motor en Facebook habría bastado para comprobar que el vehículo, aparcado en la calle de un barrio habanero, posee matrícula diplomática, como indica la letra D inicial en su identificación. El resto de dígitos identifican al país que usa el automóvil y el rango o sección diplomática a la que esté adscrita.
En este caso, aunque la cifra final es 7, que correspondería a un funcionario de rango normal, la propia consejera Zivojonovic aclaró a CiberCuba que lo usa habitualmente el embajador, cuyo vehículo oficial siempre aparece identificado con el guarismo 1 en las matrículas diplomáticas en Cuba.
El recorrido del Jaguar supuestamente robado es mucho más corto en la agitada blogosfera cubana que el del Mustang, porque se trata del clásico y confortable vehículo del embajador de su Majestad la Reina Isabel II en La Habana, donde fue usado por los Príncipes Carlos y Camila en su visita a la capital cubana, en marzo de 2019.
La matrícula del lujoso Jaguar no deja dudas de su pertenencia a la Embajada Británica en La Habana y de quiénes son sus afortunados pasajeros en los desplazamientos por la ciudad.
La versión sobre el Mustang y el Jaguar supuestamente vinculados a negocios del nieto de Raúl Castro circulado enr diversos medios digitales relacionados con temas cubano, y se difundió a través de emisoras radiales de Miami durante la pasada semana.
En otras páginas digitales también se utilizó la foto de un viejo Fiat Spider con su carrocería modificada para darle la apariencia de un Ferrari e incluirlo como parte del supuesto contrabando de automóviles desde Miami hacia La Habana, cuando las propias fotos usadas en el reportaje muestran claramente que es un vehículo común y corriente y no el mítico deportivo italiano de la escudería de Enzo Ferrari, que además circula en la capital hace más de 15 años, según testigos consultados por CiberCuba.
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