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La compañía de cruceros Carnival recibió este lunes una nueva derrota en los tribunales de Estados Unidos después de que se denegara una moción contra la demanda presentada bajo el amparo del Título III de la Ley Helms-Burton por la utilización del Puerto de La Habana.
La jueza federal Beth Bloom del Distrito Sur de Florida negó la moción presentada por Carnival contra la demanda de Havana Docks Corporation, antigua dueña del puerto de la capital de Cuba.
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Según la decisión judicial de seis páginas, a la que tuvo acceso CiberCuba, "la Corte considera que Carnival no ha superado la fuerte presunción contra apelaciones interlocutorias (...) La cuestión planteada por el demandado tampoco merece una desviación del general principio de que las apelaciones se realizarán después del juicio final".
Mickael Behn, de la familia dueña de Havana Docks, presentó ante un tribunal de Miami esta demanda contra Carnival el 2 de mayo, justo el día que entró en vigor el Título III de la Ley Helms-Burton. La claúsula legislativa permite a ciudadanos cubanoamericanos exigir ante los tribunales de EEUU una remuneración a las entidades que se beneficiaron económicamente de las propiedades confiscadas por el fallecido dictador Fidel Castro.
Es la tercera ocasión en que jueces federales de Estados Unidos niegan peticiones de cancelación de demandas contra Carnival por el uso de propiedades nacionalizadas en Cuba.
A finales de agosto, la misma jueza Bloom desestimó el recurso de Carnival porque "el demandado combina incorrectamente un reclamo de una propiedad y un interés de propiedad" en referencia a Havana Docks.
Así mismo, la compañía de cruceros se enfrenta a demandas por la utilización del Puerto de Santiago de Cuba, presentado por Javier García-Bengochea. El juez James Lawrence King desestimó también en agosto una moción de Carnival.
La compañía niega en todo momento que se haya beneficiado de propiedades confiscadas por el régimen castrista y ha apelado la decisión de King, rechazando que haya usado intencionalmente el puerto, pues desconocía que la propiedad era confiscada.
La multinacional de cruceros rechazó también su responsabilidad en torno a un resarcimiento económico de García-Bengochea. La petición de los abogados de Carnival fue presentada la pasada semana y aguarda por una decisión del juez King.
En documentos públicos del Departamento de Justicia –que datan de 1971– reconocen que Havana Docks Corporation perdió solo en 1960 más de $7 millones de dólares (exactamente $7,669,420.8 dólares) aunque entonces reclamaban más de $9 millones.
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