El custodio de un mercado agropecuario en el municipio de San Miguel del Padrón, en La Habana, se encuentra hospitalizado en estado de gravedad luego de ser apuñalado por ladrones que robaron en el establecimiento, el sábado por la noche.
Reportes en redes sociales dieron cuenta del asalto ocurrido en el agromercado de “El caballo blanco”, ubicado en la Calzada de Güines, en el municipio habanero.
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Según las versiones que han trascendido, el custodio se encontraba de guardia cuando varios individuos se acercaron al lugar con la intención de robar, y él los hizo huir lanzándoles piedras. Pero los sospechosos regresaron y le propinaron varias puñaladas, dejándolo herido de gravedad.
Luego de atacarlo, los ladrones robaron sacos de arroz y carne de las neveras, según un reporte del perfil La Tijera.
El custodio, cuyo nombre no ha sido revelado, recibió unas cuatro a seis heridas de arma blanca, una de las cuales le interesó un pulmón causándole un neumotórax, por lo que debió ser sometido a cirugía y permanece ingresado en el hospital La Benéfica (Miguel Enríquez), indicaron varias personas.
Perfiles en redes sociales habían informado en un inicio que la víctima había muerto, pero posteriormente se confirmó que logró sobrevivir a la agresión.
De acuerdo con versiones extraoficiales, los asaltantes fueron detenidos tras ser identificados a través de cámaras de vigilancia. Una vecina del barrio dijo que son jóvenes del reparto San Matías, localizado al otro lado de la Calzada de Güines, frente al agromercado.
En las últimas semanas, los asesinatos y agresiones de custodios en la ciudad de Santiago de Cuba han mantenido en alerta y atemorizada a la ciudadanía.
Dos custodios fueron asesinados, con pocos días de diferencia, en sus respectivos puestos de trabajo -un mercado agropecuario estatal y un bar restaurante- y un tercero fue agredido en el restaurante donde trabaja, pero logró sobrevivir al ataque.
Los crímenes tenían como móvil el robo y, la semana anterior, la Policía detuvo al presunto asesino, Alex Recasen Suárez, quien está implicado en otros robos violentos en el centro de la ciudad oriental.
Días después, se denunció el asalto y agresión a una mujer custodio por dos delincuentes, mientras hacía guardia en el Hospital Infantil Norte, conocido como “La Ondi”, en la propia ciudad.
En octubre pasado, la familia de Luis Enrique Ramírez Samá, quien casi pierde la vida por las graves heridas que le propinaron durante un robo en el mercado donde trabaja como custodio, en La Güinera, La Habana, denunció que la Policía dejó en libertad al autor del crimen.
El reciente ataque a otro custodio en La Habana se suma a la creciente ola delictiva y de violencia que se ha desatado en Cuba en los últimos años, en un contexto de crisis económica y social en el país.
El alza de la criminalidad mantiene en vilo a la población, mientras las autoridades insisten en afirmar que los índices delictivos han decrecido.
Preguntas frecuentes sobre la violencia y robos en Cuba
¿Qué sucedió en el agromercado "El caballo blanco" en La Habana?
El custodio del agromercado “El caballo blanco” de San Miguel del Padrón, en La Habana, fue apuñalado gravemente durante un robo. Los ladrones robaron sacos de arroz y carne tras herir al custodio, quien fue hospitalizado en estado crítico.
¿Cuál es la situación de seguridad en Santiago de Cuba?
Santiago de Cuba enfrenta una ola de violencia con múltiples asesinatos de custodios. El presunto asesino, Alex Recasen Suárez, fue detenido y está vinculado a varios crímenes violentos en la ciudad.
¿Cómo han respondido las autoridades cubanas ante el aumento de la criminalidad?
Las autoridades han realizado detenciones, pero la población critica la ineficacia policial. En algunos casos, los criminales han sido liberados supuestamente por falta de pruebas, lo que ha generado indignación entre los ciudadanos.
¿Qué impacto tiene la crisis económica en el aumento de la violencia en Cuba?
La crisis económica en Cuba ha exacerbado la violencia y criminalidad, con un aumento significativo de robos y asaltos. La inseguridad ciudadana ha alcanzado niveles alarmantes, afectando tanto a ciudadanos comunes como a trabajadores en sus puestos de trabajo.
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