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Un cubano residente en España escapó por los pelos de las recientes inundaciones ocurridas en Valencia, donde hasta el momento ha habido más de 70 víctimas.
José Delgado relató en su muro de Facebook que el martes a las 5:20 am, cuando sus hijos lo llevaban de Valencia a Madrid para tomar un avión hacia Cuba, comenzaban a caer unas lloviznas, y ellos nunca pensaron que llegara a tal magnitud.
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"Mis hijos se encuentran aún retenidos en una gasolinera pero sanos y a salvo, porque no es permitido aún entrar a Valencia", aclaró José desde su Gibara natal.
El hombre recordó que décadas atrás, la llamada DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) causaba serias inundaciones en Valencia, por lo que se decidió cambiar el cauce del río Turia que atravesaba la ciudad, pero ello no fue suficiente para evitar la catástrofe.
"Es Valencia la segunda ciudad en mi corazón. Dios pondrá su mano poderosa y minimizará los daños, porque hasta el momento se reportan más de 70 pérdidas humanas. Gracias a todos y gracias a Dios porque mi familia no ha sufrido daños", subrayó.
Al menos 70 personas han fallecido en España en las últimas horas a causa de la intensa DANA que azotó la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha fundamentalmente, aunque también hubo inundaciones en algunas zonas de Andalucía.
La situación continúa siendo crítica, con decenas de desaparecidos, especialmente en las provincias de Valencia, Letur y Cuenca.
Las operaciones de rescate continuaron toda la noche y esta mañana, con equipos de emergencias trabajando en una situación complicada debido al colapso de numerosas carreteras y fallas en los servicios de telecomunicaciones.
Los efectos del fenómeno han dejado una estela de destrucción: coches arrastrados por la corriente, puentes destruidos, rescates en condiciones extremas y daños materiales valorados en millones de euros.
Varios cientos de personas aún permanecen atrapadas en las autovías A-3 y A-5, con el acceso a las zonas afectadas extremadamente difícil.
Las principales carreteras de la provincia están cortadas, y numerosas vías secundarias también han sido inhabilitadas.
Las redes sociales se han inundado de imágenes de personas intentando refugiarse en lugares altos para protegerse de las riadas.
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