La oposición venezolana convocó manifestaciones este miércoles 28 de agosto en las calles de Caracas y otras ciudades del país, en una jornada de protestas organizada bajo el lema “Acta mata Sentencia”.
La movilización, liderada por la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), tiene como objetivo rechazar el fallo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que validó la controvertida reelección de Nicolás Maduro, anunciada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) hace un mes.
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La PUD convocó a sus seguidores a marchar con las actas de sus centros de votación en mano, argumentando que su candidato, Edmundo González Urrutia, fue el verdadero ganador de las elecciones del 28 de julio.
La oposición asegura haber obtenido el 83,5% de las actas, las cuales están disponibles en una página web creada para este propósito. En Caracas, la cita fue a las 11:00 a.m. en la Avenida Francisco de Miranda, donde se congregaron miles de personas.
Simultáneamente, el chavismo también se movilizó en apoyo a Maduro, respondiendo al llamado del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para celebrar la “victoria” en las elecciones.
Diosdado Cabello, recién nombrado ministro de Interior y Justicia, lideró la marcha oficialista, que además busca preparar al partido para futuros desafíos políticos.
La líder opositora María Corina Machado, quien ha mantenido un perfil bajo desde los comicios, participó en las protestas y afirmó que la oposición cuenta con una “estrategia robusta” para reclamar la victoria, aunque, según Infobae, no dio detalles específicos.
Machado subrayó que la coordinación entre fuerzas internas y externas será crucial para lograr un cambio en Venezuela.
El desacuerdo sobre los resultados electorales ha generado protestas, reclamos internacionales y medidas de la Fiscalía venezolana, que investiga a la oposición y ha detenido a varios periodistas.
Mientras tanto, la comunidad internacional sigue pidiendo la publicación completa de los resultados electorales, un paso que el CNE aún no ha dado.
La situación en Venezuela continúa siendo tensa, con una oposición decidida a seguir luchando por lo que considera una victoria electoral legítima, y un gobierno que mantiene su control sobre las instituciones clave del país.
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