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Trabajadores de la estación ferroviaria de la ciudad de Manzanillo, en la provincia de Granma, denunciaron el mal estado en que se encuentran las vías, el deterioro de las instalaciones, y la desidia del régimen.
“Es un peligro real”, alertó Enrique, empleado de la empresa ferrocarriles, al sitio web de noticias 14 y medio.
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Su temor se hizo real en marzo cuando se descarriló el tren nacional que cubría la ruta Manzanillo – La Habana.
Al ver los sucesos, este obrero advirtió que es cuestión de tiempo antes de que el deficiente estado de las vías provoque un hecho de mayor envergadura.
Desde entonces, Enrique y sus colegas exigieron al régimen un mantenimiento urgente de las estructuras y una solución a las montañas de basura que se acumula frente a la estación.
“Los Servicios Comunales no tienen los medios de transporte, ni suficientes trabajadores para limpiar los desechos sólidos que se encuentran en las vías férreas, lo que hace que el tren pase por verdaderos vertederos, con el consecuente peligro que esto conlleva”, explicó al medio citado.
La terminal está en un estado “vergonzoso” pues reina la peste, las plagas y la contaminación, lamentó Enrique.
El peor lugar es el lado del edificio que da al andén. El alero perdió las tejas y las vigas, además se sostiene con unos escuálidos pies de madera podridos por la lluvia.
A la vista de todos crece una explanada de basura. La misma rodea la estación de ferrocarril de Manzanillo.
Además, el sistema de sujeción del carril muestra evidencias de llevar décadas sin mantenimiento. También, las vías, que aún tienen traviesas de madera, están podridas en varios segmentos y con los clavos oxidados.
Sin embargo, como evidencia de las “prioridades” del régimen, sí hay recursos para militarizar la estación, advirtió Enrique.
Luego de unos descarrilamientos ocurridos en varios puntos del país, en 2019, el régimen estableció una base del Ejército Juvenil del Trabajo cerca de la estación de Manzanillo.
Este hecho indignó a Enrique, también por los recursos destinados a la pulcritud del monumento dedicado al líder comunista azucarero Jesús Menéndez Larrondo, asesinado en 1948 en la terminal de trenes, señaló la web 14 y medio.
El alto costo de los pasajes de avión y ómnibus, convierte a los trenes de pasajeros en la forma de transportación más socorrida entre los cubanos, en medio de la crisis que atraviesa el país.
Sin embargo, el mal estado de las vías provocó el reciente descarrilamiento en Manzanillo.
A este se suma otro suceso similar ocurrido en enero en la provincia de Holguín.
En ambos casos, el pésimo estado en que se encuentran las vías férreas, la falta de mantenimiento y escasez de piezas de repuesto, la mala señalización, la oscuridad, así como la ausencia de medidas de protección, afectan la seguridad de este medio de transporte.
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