La presencia de Lionel Messi en Miami sigue causando revuelo a donde quiera que va.
Cada vez que se conoce que está en un lugar decenas de seguidores acuden a tratar de fotografiarlo, pedirle autógrafos, posar junto a él o simplemente verlo de cerca.
Lo más leído hoy:
Así sucedió este sábado cuando el ídolo de multitudes fue con su esposa y sus hijos a un centro comercial en Lincoln Road, un importante distrito comercial de Miami Beach.
Videos compartidos en la cuenta de Instagram del usuario nivekmichael muestran a una multitud esperando fuera del local, con sus teléfonos listos a la espera de la salida del astro argentino.
"¡Messi, Messi!", gritaban muchos hasta que se abrió la puerta y al ver al futbolista, irrumpieron en aplausos.
Messi salió caminando detrás de su esposa y sus niños. La propia Antonela Roccuzzo pasó trabajo para subirse al auto.
A pesar de los esfuerzos de los encargados de la seguridad, el jugador no pudo evitar que varios fans lo aguantaran y se retrataran con él.
Él, como respuesta, jamás perdió la calma e incluso estuvo sonriente casi todo el tiempo.
El martes pasado, durante el segundo juego de Lionel Messi con el Inter Miami, un aficionado se lanzó al terreno de juego e hizo una espectacular carrera con el propósito de saludar al argentino.
Un video publicado en redes sociales mostró cómo un joven vestido con una camiseta del 10 irrumpió de forma imprevista en la cancha, se deshizo de las chancletas que calzaba y acto seguido cruzó a toda velocidad de un lado a otro del campo, mientras dos guardias de seguridad intentaban alcanzarlo sin éxito.
Uno de los guardias incluso se lanzó en plancha al suelo para intentar frenar al "espontáneo", sin éxito alguno. El hombre quedó tendido en el suelo mientras el joven alcanzaba su objetivo de llegar al área donde estaban los jugadores, donde fue detenido.
Hace 15 días, Lionel Messi causó conmoción al llegar al café Prima Pasta, de Miami Beach, donde una decena de comensales acudió a recibirlo cuando hizo su entrada.
Entre fotos, besos, abrazos y muchas risas, Messi fue agasajado por los usuarios que se encontraban en el restaurante.
Uno de los clientes le pidió un autógrafo sobre su camiseta, otro le dio un beso en la mejilla, y varios niños aprovecharon la ocasión para retratarse con la estrella futbolista.
Archivado en:
