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El influencer argentino Martín Kalbin dijo que se va a vivir a Cuba porque quiere probar el comunismo, según trascendió en sus redes sociales.
Kalbin afirmó a finales de noviembre que no solo quería tener la experiencia de vivir en Cuba, sino que ya tenía casi todo listo para su viaje porque, para él, el capitalismo ya fracasó y ahora quiere intentar vivir en el comunismo.
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Según explicó en sus primeros videos, ya no puede quedarse en Argentina por la situación económica y tampoco puede optar por Europa porque no tiene papeles, entonces, como su padre es cubano, aprovechó la oportunidad y tramitó su nacionalidad.
"Me cansé y aprovecho la nacionalidad cubana por parte de mi padre para ir a vivir a Cuba", dijo el argentino mientras invitaba a sus seguidores a acompañarlo en el viaje, a través de las redes sociales.
En sus publicaciones mostró el acta de nacimiento y aseguró tener los pasajes comprados para viajar en febrero a la isla.
¿Sus planes? Quedarse en Cuba, comprar una casa -vio algunas en internet a buenos precios- y encontrar un trabajo para subsistir.
"Vamos a ver, porque no es fácil ser cubano", dijo en sus redes sociales.
A inicios de diciembre, ya Martín tenía listo el pasaporte cubano para irse a Cuba.
"Bueno, ten preparado el pasaje de regreso y ven con las pastillas de la presión y unos cuantos calmantes o de lo contrario ven con bastante dinero porque si piensas vivir de un salario aquí, te sale más barato vivir en Dubái. Dale, cuando llegues me avisas para vernos en la cola del pollo", le respondió un cubano en Instagram.
Muchas burlas y hasta "recomendaciones" para su viaje cargadas de sarcasmo recibió Martín por parte de internautas cubanos.
El influencer cubano Michel Díaz, más conocido en el mundo de las redes sociales como Michelito Dando Chucho, sugirió que alguien fuera haciéndole los trámites para la OFICODA al argentino, para que tuviera asegurada la libreta de abastecimiento.
"Deja que vaya y no encuentre ni churrasco, ni picaña, ni el chimichurri que tanto le gusta a ver si mantiene la misma opinión", opinó alguien más.
Sin duda, habrá que acompañar el viaje del influencer, si la velocidad de internet le permite transmitir su experiencia, para ver su capacidad de resiliencia en un país sumido en crisis.
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