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GABERONE (Reuters) - Botswana no ha visto un aumento de las hospitalizaciones por COVID-19 a pesar de ser uno de los primeros países en detectar la variante Ómicron del coronavirus.
La nación africana ha conseguido vacunar completamente al 71% de sus 1,3 millones de habitantes aptos para ello, dijo este miércoles el ministro de Salud de ese país.
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La variante, de fuerte mutación, ha provocado la alarma entre científicos y gobiernos y se espera que se convierta en dominante debido a su alta transmisibilidad. Ómicron ya está en al menos 57 países.
"Actualmente, solo tenemos una persona en la UCI (cuidados intensivos). Pero hay una tendencia que hemos observado, y es que los que enferman gravemente no han sido vacunados", dijo el ministro de Salud, Edwin Dikoloti, en una conferencia de prensa.
La Organización Mundial de la Salud dijo en su informe epidemiológico semanal que necesita más datos para evaluar la gravedad de la enfermedad causada por la variante Ómicron y si sus mutaciones podrían reducir la protección de la inmunidad derivada de las vacunas.
El número de casos de COVID-19 notificados en Sudáfrica se duplicó en la semana hasta el 5 de diciembre, y llegó a superar los 62,000, mientras que se han observado aumentos "muy grandes" de la incidencia en Suazilandia, Zimbabue, Mozambique, Namibia y Lesoto.
La variante Ómicron puede eludir parcialmente la protección de dos dosis de la vacuna producida por Pfizer Inc y BioNTech, dijo el martes el jefe de investigación de un laboratorio del Instituto de Investigación Sanitaria de África en Sudáfrica, que informó de los resultados de un estudio pequeño y limitado. No obstante, Pfizer comunicó este miércoles que tres dosis de su vacuna neutralizan a Ómicron.
(Reporte de Brian Benza. Editado en español por Javier López de Lérida)
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