¿La guagua no pasaba hace dos horas y por fin llegó a la parada que está repleta? ¿Trajeron papas al puesto, hay un montón de gente y algunos no quieren respetar la cola? Esas son dos situaciones típicas y también críticas de Cuba, en las que irremediablemente se desatan la confusión y el desorden.
En la guagua la gente desesperada por tan larga espera y necesitada de acabar de llegar a su destino querrá subir al mismo tiempo, se formará el molote (tumulto) y comenzarán a empujarse por tratar de subir primero.
En la cola de la papa ¡ni qué decir!, empezará la discusión, todo el mundo intentará hablar a la misma vez y puede haber hasta quienes se ofendan y se vaya a las manos, mientras los vivos se provechan de la situación para colarse y comprar por delante de los demás.
¿Qué cubano no ha vivido esto? Es más, los hay para quienes estas realidades son su “pan de cada día”. Bueno, más bien la situación de la guagua, porque el producto papa es casi una reliquia rara que se ve si acaso una vez al año.
Volviendo al asunto, si le preguntas a un protagonista o a algún observador de cualquiera de los dos episodios descritos qué fue lo que sucedió, te dirá en buen cubano que allí “se armó”...
- Tremenda choricera.
- Tremendo arroz con mango.
- Tremenda cámara húngara.
- Tremendo despelote.
- Tremendo disloque.
- Tremendo jelengue.
- Tremenda perrera.
- Tremenda rebambaramba.
- Tremendo rebumbio.
- Tremenda recholata.
- Tremendo Recholateo.
- Tremendo titingó.
- Tremendo remandingo.
- Tremendo revolico.
- Tremendo sambeque.
- Tremendo reperpero.
- Tremendo bayú.
- Tremendo salpafuera.
- Tremendo dale al que no te dio.
¿Se te ocurre otra? Si es así, por favor, compártela en los comentarios.
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